FERNANDO NUNCA VOLVIO

Hace 8 años Silvio Caiozzi realizó un documental de 31 minutos en el cual contaba la Historia de Fernando Olivares Mori, un joven que regresaba a casa después de una prolongada ausencia... Eran más de 30 años sin que su familia supiera de él y Caiozzi retrató todo, desde el proceso de preparación de toda su familia: Su madre, sus hermanos, sus hijos y su esposa... La casa vacía y los recuerdos aún frescos de experiencias vividas con él se hacían presentes en cada escena, en cada palabra y en cada mirada de su madre.
Fernando tenía 27 años cuando se fue, tenía una vida, tenía un trabajo... lo tenía todo. Sin embargo el 5 de octubre de 1973 tuvo que irse y jamás volvieron a verle, hasta el año '91, cuando su cuerpo fue encontrado junto al de muchos otros en el patio 29 del Cementerio General.
El documental se llamó "FERNANDO HA VUELTO" , el cual fue premiado en todas partes del mundo. Es ahí donde se cuenta todo el proceso de identificación de sus osamentas, un largo trabajo de cuatro años para decirles a los Olivares Mori... Sí, este es su hermano, sí... este es su hijo.

Fernando volvía a casa y a la casa de todos aquellos que vimos ese hermoso documental, lloramos con su madre, sus hijos y hermanos... Pero la historia no terminó cuando el ataúd con sus osamentas fue depositado en el nicho del cementerio, de hecho, la segunda parte... la más macabra... comenzó a exhibirse esta semana ante todos nosotros, pero ya no a través de un documental de 30 minutos... sino que a través de los diarios y la televisión.

Hace unos días que Chile entero se ha enterado del error garrafal del Servicio Médico Legal. Luego de 15 años de devolver la esperanza a muchos familiares que no supieron nada de sus familiares en tres décadas, de tener en sus manos los cuerpos exhumados desde el Patio 29, admitieron que si, que se habían cometido algunos errores en la identificación de estos... es decir, todo ese acusioso proceso del que fuimos testigos en el documental de Fernando se fue al caño, se fue a la mierda, porque él es uno de los que fueron mal identificados.

Al final... nunca regresó Fernando, su familia vió con horror como se abría la herida, como el recuerdo de este hombre se desvanecía nuevamente hasta los oscuros pasadizos de la desesperanza... Otra vez un detenido... un detenido desaparecido.

Nuevamente el llanto... nuevamente la pena... nuevamente la rabia de preguntar

"¿DONDE ESTÁN?"

Y no obtener respuesta.