Ayer aprendí algo muy claro en especialización de política y defensa. Aprendí que la política es más sucia que cualquier vertedero del que se tenga en cuenta su existencia.
Ayer también me di cuenta de que muchas veces puedes pasar malos ratos horrendos en tu trabajo, pero debes hacer de cuenta que nunca te han hecho nada, porque hay que recordar que una tiene un futuro laboral que proteger, especialmente en una ciudad donde el gremio es más chico que un pañuelo, donde todo se sabe. Un rumor se extiende como la peste. Todo se extiende como un cáncer aquí. Hay que alejarse de las brujas. Hay que ver que me he topado con brujas este año. Creo que la mala suerte me ronda desde hace un tiempo. Una lata. Por eso creo que me quiero mandar cambiar... Algún día.
Otra cosa que noté ayer es lo importante que ha sido para mi trabajar con mi querido editor y es un hecho que le agradeceré muchas cosas en el futuro, porque vaya que he aprendido trabajando a su lado. No se equivocaban cuando me decían que era una buena persona y claro, es diferente entre todos quienes trabajan en ese lugar. He llegado a sentirlo mi hermano mayor y claro... No lo sabe... jajaja... Pero si lee este blog alguna vez, si es que se acuerda que alguna vez se lo mostré lo sabrá.
Sí, deja de reirte. Para mi eres el hermano mayor que nunca tuve. Apuesto que nunca haz tenido una hermana chica tan adorable como yo :D.
Hay que ver que en esto del periodismo he tenido de dulce y de agraz, lo cual no me intimida, me hace tener el cuero más duro. Cuando me doy cuenta de que tratan de anularme mentalmente mediante métodos poco santos, como que una editora general le diga al móvil de un diario a las doce de la noche que parta no más, que vaya a dejarla solo a ella a su casa porque la alumna en práctica se fue hace rato y que eso conlleve a que la pobre estudiante se quede practicamente botada afuera del lugar hasta cerca de la una de la mañana esperando que su ex - pololo (Que en ese tiempo era pololo... Pero obviemos los detalles escabrosos) vaya a buscarla... Cuando tratan de anularme con cosas como esas. Yo no pesco. Me paso la actitud infantil y poco educada de una señora pasada de los treinta por donde se imaginan y sigo mi vida. Claro, la salud no me ha acompañado en estos días... De hecho hace dos semanas que estoy aislada en mi casa por una descompensación grande en mis niveles de azúcar. Pero que le quede claro a todo el mundo que yo no me dejo vencer por actitudes pendejas de alguien psicológicamente afectada por vaya a saber una que traumas. Claro, por eso también tengo que cuidar de no divulgarlo a todo el orbe maulino, porque de lo contrario, quedaré cesante por siempre jamás.
Sí, deja de reirte. Para mi eres el hermano mayor que nunca tuve. Apuesto que nunca haz tenido una hermana chica tan adorable como yo :D.
Hay que ver que en esto del periodismo he tenido de dulce y de agraz, lo cual no me intimida, me hace tener el cuero más duro. Cuando me doy cuenta de que tratan de anularme mentalmente mediante métodos poco santos, como que una editora general le diga al móvil de un diario a las doce de la noche que parta no más, que vaya a dejarla solo a ella a su casa porque la alumna en práctica se fue hace rato y que eso conlleve a que la pobre estudiante se quede practicamente botada afuera del lugar hasta cerca de la una de la mañana esperando que su ex - pololo (Que en ese tiempo era pololo... Pero obviemos los detalles escabrosos) vaya a buscarla... Cuando tratan de anularme con cosas como esas. Yo no pesco. Me paso la actitud infantil y poco educada de una señora pasada de los treinta por donde se imaginan y sigo mi vida. Claro, la salud no me ha acompañado en estos días... De hecho hace dos semanas que estoy aislada en mi casa por una descompensación grande en mis niveles de azúcar. Pero que le quede claro a todo el mundo que yo no me dejo vencer por actitudes pendejas de alguien psicológicamente afectada por vaya a saber una que traumas. Claro, por eso también tengo que cuidar de no divulgarlo a todo el orbe maulino, porque de lo contrario, quedaré cesante por siempre jamás.
A pesar de que el editor que considero un hermano mayor y protector me dijo que mi trabajo en crónicas también me ha ayudado a forjar un estilo propio y a pulirme un poco, la verdad es que ya sé por donde vamos en esto de las comunicaciones y claramente la dirección está bien alejada de la comunicación corporativa, la misma a la cual todos me dicen que le hinque el diente una vez que me titule. Sí, señores, soy una cabra con vocación de obrera de las comunicaciones. Más que nada reflejar a través de mis trabajos la realidad humana de todo, porque al final todo en esta sociedad es humanizable y hay realidades que se gestan a nuestro alrededor y ni las vemos. Algo bueno, más que bueno he sacado de mi paso por el diario. Esperemos que prospere la cosa pues.
Alma! que lindo que hayas vuelto!!
ResponderEliminary me alegra leer como escribes.. con entusiasmo... con ganas !!!
sabes que serás una excelente profesional, que nadie te diga lo contrario..
y sigue por la vida con ese entusiasmo.. asi conseguiras mas cosas y lo mejor de todo pasarla bien.
cuidate!